Bután aplicará el 5% de IVA en 2026: normas clave para los no residentes

Sustituir un régimen fiscal por otro es siempre un proceso largo y difícil que implica muchas cuestiones técnicas y legislativas. Tras varios años de abordar problemas técnicos y retrasar la reforma de su régimen del Impuesto sobre las Ventas, Bután anunció que a partir de 2026 hará la transición al régimen del GST.
Impacto en los proveedores de servicios digitales no residentes
A partir del 1 de enero de 2026, Bután introducirá el tan esperado GST en lugar del actual Impuesto sobre las Ventas. La Ley de Enmienda del GST de 2025 confirmó que el tipo estándar del GST será del 5%, inferior al 7% propuesto inicialmente. Además, la Ley de Enmienda del GST mantiene las normas que obligan a los proveedores no residentes de servicios importados B2C a registrarse y pagar el GST en Bután.
La obligación de los proveedores de servicios no residentes de registrarse para el GST se activa una vez que sus ventas brutas a los consumidores butaneses superan los 5 millones de BTN (alrededor de 56.600 USD) en el último año, 2,5 millones de BTN (alrededor de 28.300 USD) en los últimos seis meses, o se espera que superen los 5 millones de BTN en el próximo año.
En particular, la Ley ofrece una definición detallada de los servicios electrónicos, que abarca un amplio espectro de actividades digitales prestadas a través de redes de telecomunicaciones. Esto incluye el alojamiento de sitios web, el mantenimiento remoto de software y equipos, el suministro y las actualizaciones de software y cualquier otro servicio prestado por vía electrónica que pueda considerarse suministro B2C importado.
Una vez registrados, los proveedores no residentes deben emitir facturas fiscales en el momento en que el IVA sea exigible, que contengan toda la información esencial, como la fecha, los datos del proveedor y del cliente, y los importes totales. Además, si las ventas se realizan a través de una plataforma de distribución electrónica, como los mercados en línea, la propia plataforma, como proveedor considerado, es responsable de recaudar y remitir el GST en lugar del proveedor subyacente.
Conclusión
Para quienes incumplan estos requisitos, la Ley prescribe una sanción anual del 15% por demora en los pagos. Además, el incumplimiento deliberado y reiterado de la obligación de presentar las declaraciones del IVA puede constituir un delito. Teniendo en cuenta estas sanciones y el corto plazo para preparar la transición al nuevo régimen fiscal, los sujetos pasivos, especialmente los proveedores de servicios no residentes, deben actuar con prontitud y tomar las medidas necesarias para estar preparados para 2026 y la aplicación de la nueva normativa.
Fuente: KPMG
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